Razones Para Cultivar Tu Propia Marihuana

Posiblemente como consumidor de marihuana ha pasado por tu mente la idea de cultivar tu propia hierba. Pero por diferentes razones no lo has hecho.

Muchas personas quieren tener su propio cultivo pero no lo hacen ya sea por temor a que el vecino chismoso se vaya a enterar, la policía te pueda arrestar, o simplemente por pura apatía. Pero si tu cultivo es personal, no tienes la intención de comercializarla, tienes el espacio adecuado, y sobre todo las ganas de hacerlo, no hay de que preocuparse y es momento de poner manos a la obra.

Si todavía no te decides a tener tu propio cultivo, aquí te dejamos algunas razones las cuales te podrían hacer cambiar de parecer:

1- Cultivar tu propia hierba es más barato que estar comprando

¿Alguna vez te has sentado a calcular cuánto gastas en hierba? Dependiendo de la ciudad en la que vivas y el distribuidor con el que compres, los costos de la hierba siempre van a variar. Si eres un fumador empedernido o un paciente que depende de un suministro constante, los costos se elevarán aun más. A esto agrégale lo que te gastas en gasolina o transporte público para trasladarte al punto de venta y el tiempo empleado en el viaje mismo, claro que si el distribuido hace entregas o envíos te estarás ahorrando un poco.

Cuando es tu primero cultivo la inversión puede que sea un poco elevada, pero ten en cuenta que desde ese primer cultivo los costos se recuperan. Una vez que tengas una técnica adecuada de cultivo y tengas todos tus procesos organizados, ten por seguro que estarás exprimiendo y recuperando cada centavo.

2- Tienes el control de tu suministro

Cultivar cannabis de buena calidad requiere un poco más que tirar algunas semillas en la tierra y esperar tres meses. A un nivel profesional estamos hablando de estrictos regimenes de nutrientes, horarios, e incluso algunos pesticidas. Muchas veces no tienes ni idea de lo que contiene en el cannabis que compras en la calle. ¿Trató el cultivador bien las plantas, se les ha hecho pruebas de pesticidas y metales pesados?

Cuando cultivas tu propia cannabis, tienes el control de todo. Desde el medio de cultivo en el que las plantas se sientan y los nutrientes que reciben, la pureza del agua que les das y la esterilidad de tu entorno de cultivo. La elección es completamente tuya. ¿Cultivó una variedad que lo dejó volado? Haz clones y mantenlos vivos para siempre. Si te gusta la hierba de colores, baja la temperatura de tu carpa de cultivo y disfruta de los cogollos púrpuras. Una vez que tengas algo de experiencia, puedes incluso crear una variedad completamente nueva que nadie más que tú tendrá.

Y eso nos lleva a nuestro siguiente punto:

3- Nunca más te quedarás sin hierba.

Si los últimos meses han demostrado algo, es que nunca se sabe lo que está por venir. Cuando dependes de alguien más para que te suministre tu mercancía, estás jodido en el momento en que se meten en problemas. Ya sea que desaparezca tu conecte, o pasen cosas que están fuera de tu control como la pandemia del coronavirus.

Cuando cultivas tu propia hierba, no dependes de nadie. Con la configuración y la técnica adecuadas, puedes tener una producción consistente de brotes frescos, cosechando unas pocas plantas cada mes. A menos que la cantidad que fumes esté absolutamente fuera de los gráficos, eso debería ser suficiente hierba para asegurarte de que nunca se te acabe.

4. Cultivar es más fácil de lo que crees

Cultivar tu propia cannabis no es tan difícil como podría parecer. Si puedes cultivar una planta de ornato, entonces seguramente puedes cultivar tu propia cannabis. No es tan simple como eso, pero mientras comiences con una variedad que sea relativamente fácil de cultivar, todo lo que tienes que hacer es asegurarte de que tienes la configuración correcta, y darle a tus plantas lo que necesitan.

Cuando cultivas tu propio cannabis, tienes que ser discreto. Va a ser muy difícil esconder un cultivo en tu patio (sólo el olor te delatará) pero puedes cultivar con seguridad unas pocas plantas en un cuarto de cultivo bien preparado o en una carpa sin que nadie se entere. Hay muchos productos como filtros de aire y de carbono que eliminarán el olor de tu plantación. Si inviertes en una caja de curado adecuada, incluso tu hierba seca permanecerá de incógnito.

Cultivar tu propia cannabis es como montar en bicicleta: una vez que la dominas, es una habilidad que nunca olvidarás.

5- Es extremadamente gratificante

¿Recuerdas lo orgulloso que estabas cuando germinó tu frijolito cuando estabas en la primaria? Cultivar tu propia hierba es como esa sensación, pero con una mayor altura. Cuando pasas unos meses viendo a este ser vivo crecer de un pequeño brote a una gloriosa, exuberante y verde planta, no puedes evitar sentirte emocionalmente vinculado. Es casi como criar pequeños bebés verdes que no te dan nada más que alegría.

Todo lo que le hagas a tus plantas tendrá un efecto casi inmediato en su bienestar y cuando llegues a tu primera cosecha y fumes los frutos de tu trabajo, hace que ese colocón sea mucho mejor.

Ahora que ya sabes algunas de las razones para cultivar tu propia hierba, ¿qué estás esperando?