El mercado mundial del cáñamo podría alcanzar los 18,600 millones de dólares en 2027 si los países de todo el mundo toman medidas para aclarar la situación legal del cultivo y abordar otras cuestiones clave, según un amplio informe sobre el sector elaborado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
Citando cifras del investigador Krungsri Research Intelligence, que forma parte del Bank of Ayudhya, con sede en Bangkok, el informe sugiere que en los próximos cinco años podría cuadruplicarse el valor de mercado del cáñamo desde los 4,700 millones de dólares estimados para 2020.
El informe de 84 páginas define los pasos que los gobiernos pueden dar para capitalizar el cáñamo por su potencial económico y social, ofrece una visión general del cáñamo industrial por categorías de producción y muestra cómo se reflejan esos derivados del subsector del cáñamo en las estadísticas comerciales.
«Las cadenas de valor del cáñamo pueden impulsar el crecimiento en las zonas rurales y contribuir tanto a la industria manufacturera como a la alimentaria. Sin embargo, para explotar plenamente esas potencialidades, los países pueden tener que tomar medidas específicas», según el informe, que supone la primera vez que un organismo intergubernamental internacional publica un documento que promueve el uso del cáñamo industrial.
Claridad Legal
Aclarar el estatus legal del cáñamo como sustancia no tóxica es el primer paso que deben dar los gobiernos para minimizar los riesgos legales y financieros de los productores, señala el informe.
«El cultivo de variedades no tóxicas de C. Sativa L. debería permitirse en todos los países, aunque pueda requerir un estricto control gubernamental. Además, debería adoptarse un enfoque que favorezca el umbral de THC en los productos finales, en lugar de en el campo, para incentivar un enfoque y usos de la planta entera», dice el informe.
Como alternativa, los legisladores podrían establecer umbrales de THC más elevados para los cultivos «en el campo» hasta niveles reconocidos científicamente como no tóxicos. «Esto permitiría aumentar el conjunto de variedades utilizables en las cadenas de producción de cáñamo, incrementando así de facto la posibilidad de cultivar las variedades mejor adaptadas a condiciones y características medioambientales específicas», según el informe.
También deben identificarse otras limitaciones a la producción impuestas por los marcos normativos, y deben desarrollarse estrategias de cooperación regional para establecer cadenas de valor viables y sostenibles, sugiere asimismo el informe.
Otras recomendaciones
Además de los cambios legales, el informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) aborda:
La información: Se necesita más transparencia para la industria del cáñamo, incluyendo datos públicos sobre la producción de cáñamo en todos los productos, datos específicos de cada país y precios, aconsejan los autores del informe.
«A nivel internacional, existe una clara necesidad de mejorar la disponibilidad y accesibilidad de la información. Deben dedicarse esfuerzos a mejorar el estado actual de la información sobre todos los aspectos de este producto básico.
«Es necesario incluir categorías adicionales para cubrir, por ejemplo, las semillas de cáñamo, el aceite de semillas de cáñamo, los productos derivados de las semillas de cáñamo, las oleorresinas de cáñamo y los aceites esenciales», según el informe.
Sostenibilidad: El informe también sugiere que las consideraciones medioambientales y sociales son «fundamentales para el éxito de cualquier política relacionada con el cáñamo» y, por tanto, deben tenerse en cuenta en marcos jurídicos y normativos más amplios.
«Para garantizar un sector del cáñamo sostenible a nivel mundial, el cultivo de cáñamo puede ofrecer beneficios medioambientales que pueden tenerse en cuenta en las políticas destinadas a mitigar los efectos del cambio climático y restaurar ecosistemas sanos», observa el informe.
Como el cultivo de cáñamo puede ayudar a maximizar el uso de la tierra, también puede contribuir a aumentar los ingresos de los agricultores y las comunidades rurales, especialmente en los países en desarrollo, señala el informe.
Estrategia industrial: La UNCTAD recomienda que en la mayor parte del mundo se considere una estrategia integral para el cáñamo, y señala que «esto es tanto más deseable cuanto que los mercados del cáñamo siguen siendo relativamente pequeños y las limitaciones económicas inherentes a dichos mercados».
Un planteamiento integral de la planta puede ser rentable tanto en el mercado primario como en el secundario, y el cultivo del cáñamo podría monetizarse aún más integrando sistemas de créditos de carbono de forma voluntaria, señala también el documento.
Con información de Hemp Today