La plantación, repartida entre 11 campos, ocupaba más de 185 hectáreas. Tendrían un valor de más de 1,000 millones de dólares en el mercado negro.
Una operación liderada por la oficina del sheriff del Condado de Kern, en el estado norteamericano de California, y que contó con la ayuda del FBI y del Departamento de Pesca y Vida Salvaje del estado, permitió encontrar una gigantesca plantación ilegal de marihuana de más de 185 hectáreas de extensión.
Tal y como revela la CNN, la investigación comenzó después de recibir noticias sobre una plantación de cáñamo, supuestamente legal. Sin embargo, detrás de esa fachada había una extensión similar a la ocupada por más de 200 campos de fútbol en los que crecían de forma ilegal 10 millones de plantas de marihuana.
Según la oficina del sheriff, la plantación se localizó en el área de Arvin, unos 160 kilómetros al norte de la ciudad de Los Ángeles, repartida entre 11 campos distintos: «Estos campos ilegales de marihuana se cultivaron bajo la apariencia de una producción legítima de cáñamo«, pero no lo eran.
Para ser cáñamo industrial, el Código de Alimentos y Agricultura y el Código de Salud y Seguridad establecen que debe contener un máximo del 0,3 por ciento de THC, la sustancia psicoactiva que se encuentra en el cannabis. Sin embargo, las pruebas demostraron que los niveles de THC en esa plantación eran muy superiores al límite legal.
Los 10 millones de plantas que se encontraron y que se destruyeron en esta operación tendrían un valor aproximado en el mercado negro de unos 1000 millones de dólares. La oficina del sheriff de Kern asegura que esta operación de drogas sigue en marcha y no ha especificado hasta el momento si se han producido detenciones.