EEUU Por Fin Acepta Que Su Población Tiene Problemas Con El Consumo Excesivo De Drogas

Ante las voces que cuestionan la guerra contra las drogas, el encargado para Latinoamérica del Departamento de Estado de EE.UU., Brian Nichols, admitió hoy que su país tiene la «responsabilidad» de frenar la demanda interna de estupefacientes, aunque pidió también esfuerzos a las naciones productoras.

El tema está en el centro de las fricciones entre EE.UU. y el Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, por la lucha contra el fentanilo y ha cobrado relevancia por el plan del mandatario colombiano, Gustavo Petro, quien considera fracasada la estrategia militar contra el narcotráfico.

UN ENFOQUE MÉDICO DE LAS DROGAS

«Aceptamos plenamente nuestra responsabilidad en controlar la demanda, pero también hay que tratar la producción de opioides sintéticos y otros estupefacientes. Eso es clave», dijo Nichols este miércoles en una entrevista en español con EFE.

Nichols aseguró que Estados Unidos tiene un «enfoque médico y no criminal» sobre el problema de las adicciones en el país y está invirtiendo en centros de atención y prevención.

Pero además de frenar el consumo, reivindicó que «hay que colaborar para combatir» la producción, porque, agregó, es un problema que no solo afecta a Estados Unidos, sino al resto del continente americano y al mundo.

HAY ZONAS DE MÉXICO «AFECTADAS» POR EL NARCO

Desde que este mes fueron asesinados dos estadounidenses en México, la tensión bilateral se ha elevado hasta el punto que los republicanos ha pedido una intervención militar en territorio mexicano para combatir a los cárteles, algo que ha descartado el Gobierno del presidente Joe Biden.

No obstante, desde la Administración estadounidense han señalado que México debería hacer más contra el fentanilo, mientras que el secretario de Estado, Antony Blinken, ha afirmado que hay zonas del país «controladas» por el narco, lo que ha negado López Obrador.

Cuestionado por el asunto, Nichols matizó que hay territorios de México «afectados» por el crimen organizado y que esto impacta en «la seguridad y el bienestar tanto de los mexicanos como de las personas que visitan México».

«Hemos invertido miles de millones de dólares en colaboración en materia de seguridad con México y vamos a seguir trabajando hombro con hombro con el Gobierno mexicano», subrayó.

MANTENER LA PRESIÓN SOBRE CULTIVOS

Nichols participó esta semana en Washington en el Diálogo de Alto Nivel entre Estados Unidos y Colombia, el primero desde que llegó a la Presidencia colombiana Gustavo Petro, quien ha querido repensar la relación bilateral, sobre todo en términos de drogas, incidiendo en que la lucha contra el narcotráfico y la erradicación de cultivos han fracasado.

El funcionario opinó que la «erradicación voluntaria» de cultivos de coca es mejor, aunque afirmó que «hay que mantener la presión sobre la producción». También apostó por «aumentar la interdicción» de drogas en alta mar, puertos y aeropuertos.

A Estados Unidos no le preocupa que las negociaciones del Gobierno colombiano con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) puedan frenar extradiciones de presuntos narcotraficantes a territorio estadounidense.

«Las extradiciones de Colombia siguen en curso con el mismo ritmo que han tenido durante los últimos 20 años, no han variado», aseguró.