Buenas noticias para todos aquellos que, por desgracia, padecen esta enfermedad. Según un estudio reciente, el cannabis puede ayudar a frenar la expansión de las células más agresivas de este tipo de tumores. Lo hace mediante un poderoso aliado, el ácido cannabidiólico (CBDA), un componente no psicoactivo encontrado en las plantas de marihuana.
Cada día conocemos noticias nuevas sobre los beneficios del cannabis. Sus múltiples efectos son objeto de estudio en los laboratorios, mientras que la marihuana con fines medicinales está cada vez más aceptada en la sociedad. Si además esta planta puede combatir enfermedades tan graves como el cáncer, es imposible no estar de enhorabuena.
Un estudio realizado por la Universidad de Hokuriku (Japón) ha descubierto que el ácido cannabidiólico (CBDA) incluido en la planta de marihuana frena de forma eficaz la propagación de las células más agresivas del cáncer de mama. El CBDA es el precursor ácido del cannabidiol (CBD) y se caracteriza por ser un compuesto sin efectos psicoactivos propio de las cepas cannábicas. Cuando el CBDA se calienta a través de un cigarrillo, por vaporización o por descarboxilación, se transforma en el famoso CBD, el cannabinoide medicinal por excelencia.
Un grupo de investigadores lleva trabajando en este campo desde hace años. En 2012 realizó un estudio que se convirtió en pionero por demostrar que el CBDA impide la propagación de las células cancerígenas más invasivas. En 2014, descubrió que recurría a la inhibición de una enzima para evitar la expansión de las células. Dicha enzima es la ciclooxigenasa -2, también conocida como COX-2 e implicada en la metástasis de las células afectadas por el cáncer así como en los procesos inflamatorios.
Ahora, el equipo identificó el CBDA como un inhibidor de la migración de las células MDA-MB-231, una línea celular del cáncer de mama humano. En concreto, los investigadores citan un posible mecanismo basado en la regulación negativa de c-fos, un protooncogén (gen que actúa sobre el crecimiento y división de la célula) vinculado a varios tipos de cáncer. Con este nuevo estudio, los científicos han consolidado el éxito de sus investigaciones anteriores y han ido un paso más allá, identificando el mecanismo molecular responsable de la inhibición de la COX – 2 gracias al CBDA.
Según el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, el de mama es uno de los tipos más comunes de la enfermedad allí y en los países más desarrollados. La organización sin ánimo de lucro Breastcancer.org informa de que aproximadamente una de cada ocho mujeres en Estados Unidos (un 12 % del total) desarrollarán la enfermedad a lo largo de su vida. Al contrario de lo que parece, tanto hombres como mujeres pueden desarrollar cáncer de mama, y la asociación ha estimado cerca de 247.000 nuevos casos en 2016 solo en Estados Unidos. En España, se diagnostican 26.000 casos nuevos cada año pero, afortunadamente, el 85 % de las mujeres supera la enfermedad cinco años después de su diagnóstico.
Por otra parte, esta investigación también sugiere la existencia de otros cannabinoides con poderosos efectos anticancerígenos que podrían ayudar con el tratamiento de otros cánceres, como el de pulmón, próstata y colon. Quién sabe si en un futuro una planta tan polifacética como el cannabis puede acabar con una enfermedad de tanto calibre.
