Consumo De LSD Mejora La Capacidad De Aprendizaje: Estudio

Un nuevo estudio publicado en Psychological Medicine ha demostrado que la dietilamida de ácido lisérgico (LSD) mejora la capacidad de aprendizaje en humanos y potencia la conducta exploratoria. Estos hallazgos podrían contribuir a comprender mejor los mecanismos cognitivos subyacentes que explicarían los efectos terapéuticos del LSD.

La psicoterapia asistida por LSD ha demostrado ser prometedora en el tratamiento de trastornos como la ansiedad, la depresión y el trastorno de estrés postraumático, aunque sigue siendo ilegal en la mayoría de los países. El LSD, cuando se usa en un entorno controlado bajo la supervisión de un terapeuta capacitado, se cree que mejora la capacidad del paciente para explorar y procesar emociones y experiencias difíciles, lo que conduce a una mejoría en la terapia.

Los autores del estudio, liderados por Jonathan Kanen, investigador de la Universidad de Cambridge y residente de psiquiatría en The Mount Sinai Hospital en Nueva York, estudiaron los efectos del LSD en el aprendizaje y la toma de decisiones en humanos. Para ello, utilizaron una tarea llamada «aprendizaje probabilístico de inversión» (PRL, por sus siglas en inglés), que evalúa cómo los participantes toman decisiones en situaciones de incertidumbre y cómo adaptan su comportamiento en función de los comentarios que reciben.

El estudio incluyó a 19 voluntarios sanos mayores de 21 años, quienes asistieron a dos sesiones con al menos dos semanas de diferencia entre ellas. En cada sesión, los participantes recibieron ya sea LSD o un placebo en un diseño ciego y balanceado de sujetos dentro de los grupos. Esto significa que cada participante recibió tanto LSD como placebo, pero el orden en que los recibieron fue determinado al azar y contrarrestado entre los participantes.

Los resultados indicaron que el LSD aumentó la velocidad con la que los participantes actualizaban sus expectativas basadas en los comentarios que recibían. Esto significa que aquellos que tomaron LSD aprendieron más rápido de sus experiencias que los que tomaron un placebo. Además, aquellos que tomaron LSD fueron más exploratorios en su comportamiento, lo que significa que eran más propensos a probar nuevas opciones al tomar decisiones.

Según Kanen, el LSD mejoró un proceso de aprendizaje fundamental al aumentar la velocidad con la que las personas actualizan sus expectativas en función de los resultados que experimentan, especialmente después de resultados mejores de lo esperado. Estos resultados podrían ser relevantes para entender los posibles efectos beneficiosos del LSD en personas con ciertos trastornos mentales.

Sin embargo, Kanen señaló que su estudio solo evaluó los efectos agudos del LSD, lo que significa que solo examinó los efectos inmediatos y a corto plazo de la droga. Se necesitaría más investigación para investigar los posibles efectos a largo plazo del LSD en el aprendizaje y la toma de decisiones, y cómo estos efectos se relacionan con los resultados terapéuticos.