Bubble hash: qué es y como se hace

El Bubble hash está considerado como uno de los mejores y más puros hachís que existen, y lo mejor es que no es nada difícil de hacer.

En lo referente a las numerosas variedades de hachís, no hay muchas que puedan competir con la enorme calidad de un bubble hash bien hecho. Como su nombre indica, al calentarse, el bubble hash se derrite y forma burbujas. Es una indicación de su pureza, y se traduce en una delicada y placentera experiencia. Por el contrario, el hachís que arde cuando se calienta es un indicio de mala calidad. Es la mala materia vegetal del hachís lo que hace que arda, y el resultado es una experiencia mucho más ruda, sin refinar. El Bubble hash es el mejor hachís que existe – y como dice el dicho: ¡si no burbujea, no vale la pena!

CÓMO HACER TU PROPIO BUBBLE HASH

¿Cómo se hace? Por suerte, no es muy complicado. El proceso para hacer bubble hash es bastante riguroso, pero la diferencia en calidad es extraordinaria y el esfuerzo merece la pena. En esencia, el proceso para crear bubble hash requiere de una combinación de cannabis, agua y hielo, y de una una serie de bolsas de malla cada vez más finas, para filtrar la materia vegetal y dejar que los tricomas pasen a través de ellas. También es una estupenda forma de utilizar los recortes que de otro modo se tirarían, porque hasta los recortes tienen tricomas.

Por lo general, se usan 3-6 bolsas de malla. Cuanto menos bolsas se usen, más probabilidades habrá de que la materia vegetal que se intenta evitar se cuele en el producto final. Así que para producir lo mejor de lo mejor, en esta guía vamos a utilizar seis bolsas, pero hazlo como mejor te parezca.

Los tamaños de las bolsas usadas son de 220U y 190U, 160U, 73U, 45U y 25U. Muchos kits de bolsas especializadas son de tamaños parecidos.

Además de estas bolsas de malla, se necesita:

2 cubos grandes

Agua

Hielo

Algo para remover la mezcla

Recortes de marihuana – a mayor calidad, mejor será el producto final será

INSTRUCCIONES:

1. Primero, calcula cuánta marihuana vas a necesitar. Una regla general es que 10 gramos producen 1 gramo de hachís, pero dependerá del tipo de material que vayas a usar. Por ejemplo, los recortes que contengan un montón de hojas, no tendrán tantos tricomas como los recortes de brote.
2. Pon los recortes de marihuana en uno de los cubos, y añade un poco de hielo. El hielo es muy importante, ya que el frío hará que los tricomas sean más frágiles, haciendo que sea más fácil que se separen de los recortes. Además, el hielo actúa como material abrasivo, ayudando a sacar los tricomas cuando se remueve la mezcla. Por ello, hay que añadir una cantidad considerable.
3. Añade agua fría. Bastante, hasta que la marihuana esté completamente sumergida.
4. Coge el objeto para remover, como un palo limpio de una escoba, y mezcla todo con un movimiento circular, cambiando de dirección de vez en cuando. Haz esto durante unos 10-15 minutos.
5. Prepara las bolsas de malla en el otro cubo. Empieza con la de 25U, colocándola con los bordes curvados sobre la parte superior del cubo. Sigue haciendo esto con las otras bolsas, colocándolas una dentro de la otra en orden ascendente.
6. Vierte la mezcla con cuidado del primer cubo al segundo con las bolsas.
7. Deja reposar la mezcla durante 15 minutos.
8. Ahora viene la parte en la que las bolsas se sacan una a una. Empieza con la del centro – que debe ser la de 220U – levantándola con cuidado y dejando que escurra el agua. Puedes verter más agua mientras la sostienes sobre el cubo, para eliminar los tricomas que se hayan podido quedar pegados. Ponla a un lado cuando esté vacía; tendrá la mayor parte de materia vegetal.
9. Continúa con este proceso para el resto de las bolsas, sacándolas con cuidado y dejando que escurran.
10. Comenzarás a ver un poco de hachís en las bolsas. No es el mejor, pero es utilizable, así que ten cuidado cuando lo pongas a un lado.
11. La última bolsa es la que requiere de mayor cuidado. La paciencia es clave. Saca la bolsa con cuidado, moviéndola despacio para que escurra bien, pero no muy fuerte para que no se rompan los tricomas.
12. Saca todos los tricomas de la última bolsa y ponla sobre una superficie antiadherente, para que se seque durante unas horas. Una vez seca, tendrás unos excelentes tricomas listos para usar, o para hacer hachís.

Como puedes ver, el proceso para producir bubble hash es bastante sencillo, solo necesitas bolsas para el filtrado. Si las tienes, puedes crear hachís de calidad en un santiamén.

Fuente Zamnesia