Una universidad del Reino Unido está lanzando una de las primeras certificaciones de posgrado en el mundo sobre psicodélicos, con el fin de enseñar a los trabajadores de la salud cómo usar psilocibina, LSD, MDMA y otras drogas psicoactivas en terapia.
El certificado de la Universidad de Exeter consolida a los psicodélicos como un área de importancia científica en el Reino Unido. Podría ayudar a allanar el camino para que las terapias clínicas estén disponibles en los próximos cinco años, con algunos tratamientos en las etapas finales de los ensayos clínicos.
Esto seguiría a Australia, que se ha convertido en el primer país en permitir que los psiquiatras receten psicodélicos para la depresión resistente al tratamiento. En Estados Unidos, el MDMA podría obtener licencia para tratar el trastorno de estrés postraumático a finales de este año, y Oregón y Colorado planean legalizar el uso regulado de psilocibina.
Celia Morgan, profesora de psicofarmacología en la Universidad de Exeter y co-líder del programa, dijo: «A medida que el mundo se despierta al potencial de los psicodélicos para ser una parte importante del arsenal para tratar algunas de nuestras condiciones de salud mental más dañinas, es vital que estemos capacitando a la fuerza laboral para satisfacer la demanda. El cuerpo global de evidencia de alta calidad es ahora irrefutable: los psicodélicos pueden funcionar donde otros tratamientos han fallado».
Al señalar que las principales barreras para su uso eran legales y estructurales en lugar de médicas, agregó: «Creo que esto muestra cuánto hemos avanzado desde el miedo y el estigma que acosaron a este campo durante años, un cambio que también vemos reflejado en las principales universidades de todo el mundo que están llevando a cabo ensayos clínicos de calidad.
«El control de la mayoría de estas sustancias en la Lista 1, lo que significa que no tienen valor médico, sigue siendo la mayor barrera, pero seguimos siendo optimistas de que esto pueda cambiar en el Reino Unido con el peso cada vez mayor de la evidencia, como está comenzando a suceder en países como Estados Unidos y Australia».
El programa se basará en la investigación líder en el mundo de Exeter sobre psicodélicos, y se llamará Psicodélicos: Mente, Medicina y Cultura. Se presentó en Breaking Convention, la conferencia de psicodélicos más grande de Europa.
El programa está dirigido a trabajadores de la salud y terapeutas, así como a cualquier persona interesada en el potencial emergente de los psicodélicos, incluidos aquellos que deseen aprovechar un mercado de atención médica psicodélica que se prevé que valga £8.4 mil millones para 2028.
El certificado cubrirá una amplia gama de temas, incluyendo la enseñanza sobre terapias psicodélicas existentes e investigación en psicología, psiquiatría y neurociencia, así como módulos sobre filosofía, como las percepciones sobre la conciencia y la metafísica que brindan los psicodélicos, y discusiones sobre la descolonización de la investigación y práctica psicodélica, incluyendo un análisis antropológico de las culturas que han utilizado psicodélicos durante siglos.
En los años 50 y 60 se descubrió que los psicodélicos tenían aplicaciones prometedoras en tratamientos de salud mental, pero la investigación se prohibió como parte de la represión política del consumo de drogas ilícitas.
Sin embargo, en los últimos 10 años la tendencia ha cambiado, ya que cada vez hay más estudios que demuestran que las drogas psicodélicas pueden tratar trastornos como la depresión, la ansiedad, el estrés postraumático, el trastorno obsesivo compulsivo, la adicción al tabaco y la dependencia del alcohol y otras sustancias.
