Según una nueva investigación, la terapia asistida por psicodélicos podría ser un tratamiento sorprendentemente eficaz y duradero para los síntomas relacionados con la ansiedad y la depresión.
Como se detalla en un nuevo estudio publicado en la revista Biological Psychiatry, un equipo de investigadores suizos administró a 20 participantes, a los que se les había diagnosticado una enfermedad que ponía en peligro su vida, y a otros 22 participantes con un trastorno mental, cantidades significativas de dietilamida de ácido lisérgico (LSD) bajo la supervisión de un terapeuta capacitado.
Los resultados, medidos mediante el uso de cuestionarios validados científicamente y ampliamente utilizados, parecen haber sido mucho mejores de lo que los investigadores esperaban.
«La respuesta fue sorprendentemente sostenida», dijo a PsyPost Matthias Liechti, coautor del estudio y profesor de farmacología clínica del Hospital Universitario de Basilea (Suiza).
Un estudio piloto precedente, más pequeño, descubrió que el LSD podía reducir los síntomas de ansiedad en quienes padecían enfermedades que ponían en peligro su vida.
«En primer lugar, queríamos confirmar un estudio piloto sobre los efectos del LSD en pacientes con ansiedad y enfermedades potencialmente mortales», dijo Liechti a PsyPost. «En segundo lugar, también queríamos explorar los beneficios terapéuticos en pacientes con un desorden de ansiedad como el trastorno de ansiedad generalizada pero sin presencia de enfermedades somáticas».
El uso de drogas psicodélicas con fines terapéuticos es un campo de investigación en rápido crecimiento. Algunos científicos ya están investigando si la psilocibina, la sustancia alucinógena de los hongos psilocibios, podría utilizarse también para tratar la depresión.
«Además, queríamos utilizar el LSD en lugar de la psilocibina, que es la más utilizada en la investigación psicodélica moderna, para ampliar el campo», añadió Liechti.
Los participantes en el estudio recibieron LSD o un placebo en tres visitas que abarcaron un periodo de 24 semanas. A los que recibieron LSD se les administraron 200 microgramos, el extremo superior del rango con fines terapéuticos.
«El LSD produjo fuertes reducciones de ansiedad, depresión y sintomatología psiquiátrica general en comparación con el placebo en el primer período de tratamiento», escriben los investigadores en su artículo. «Los efectos fueron máximos dos semanas después de la segunda sesión de LSD y se mantuvieron hasta 16 semanas».
Pero un estudio de este tipo también conlleva algunos riesgos inherentes. El equipo observó nueve «acontecimientos adversos graves», seis de los cuales «ocurrieron durante el período de LSD» y tres «durante el período de placebo», según el documento.
Uno de los pacientes incluso tuvo que » ser retenido durante la noche y dado de alta por la mañana», como dijo Liechti a PsyPost, pero afortunadamente «no experimentó más síntomas a largo plazo».
También está el hecho de que los pacientes probablemente no tuvieron problemas para averiguar si se les dio LSD o un placebo, a juzgar por si empezaron a «viajar», lo cual es una dificultad clásica en el estudio de las drogas psicodélicas en un entorno clínico.
«Queda por demostrar si el cegamiento puede mejorarse con estos enfoques de placebo activo y el cegamiento válido sigue siendo un reto en cualquier ensayo que utilice psicodélicos, así como en muchos otros ensayos clínicos», concluye el equipo en el artículo.
A pesar de los primeros éxitos, el uso generalizado de los psicodélicos con fines terapéuticos está todavía a muchos años de distancia.
«Se necesitan más ensayos de mayor alcance para confirmar estos hallazgos», dice el artículo, y afortunadamente, eso no está fuera de cuestión, dado el aumento del interés.
Con información de Futurism, Psypost.