INTRODUCCIÓN A LOS FITOCANNABINOIDES Y A LA CANNABIDIVARINA (CBDV)

La raza humana ha estado expuesta durante demasiado tiempo a la planta del cannabis sin llegar a comprenderla en su totalidad. Analicemos algunas cosas que quizás no conocías sobre la hierba.

¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que aprendiste algo nuevo sobre el cannabis? ¿Cuándo fue la última vez desde que escuchaste hablar de un cannabinoide diferente del THC o el CBD? Existe una importante escasez de información y las investigaciones se retrasan por motivos burocráticos, pero por suerte todo esto está cambiando. El amplio proceso de legalización en los Estados Unidos y en otros países del mundo está generando importantes descubrimientos en el ámbito del cannabis.

Antes de que nos adentremos en mayores profundidades, es muy urgente y necesario que hagamos una presentación del término «fitocannabinoides». Mientras los endocannabinoides son los cannabinoides que produce tu cuerpo de forma natural, los fitocannabinoides son los que se encuentran en plantas como la marihuana. Entre estos se encuentran los ya conocidos THC y CBD. Los más de 100 fitocannabinoides que hay en la hierba comparten propiedades similares con los cannabinoides producidos de forma natural por tu cuerpo. Estos se adhieren a los receptores que se extienden por todo el cuerpo humano, por el cerebro, el sistema nervioso y el sistema inmune. Y esto es lo que te provoca el típico «subidón» del cannabis.
TRATAMIENTOS CON CBDV

Las investigaciones recientes muestran el potencial medicinal del CBDV para tratar la epilepsia y otras enfermedades neurológicas. Todavía no se han desarrollado investigaciones sobre sujetos humanos, pero este cannabinoide ha demostrado ser efectivo como antiepiléptico y anticonvulsivo en estudios con ratones.

Estos descubrimientos no son meras especulaciones. Justin Gover, consejero delegado de GW Pharmaceuticals, ha afirmado que «esta patente es importante porque creemos que el CBDV tiene potencial para convertirse en una opción nueva e importante en el tratamiento de la epilepsia», cuando se le preguntaba acerca de la patente ya registrada para el uso del CBDV como tratamiento de los ataques epilépticos.

La Universidad de Reading, en Londres, también sostiene que el CBD y el CBDV tienen propiedades significativas como antiepiléptico, además de resultar efectivo para frenar las convulsiones.

Un ataque epiléptico tiene muchos síntomas, de entre los que las convulsiones son los más preocupantes y comunes. El CBDV no solo ayuda a prevenir los ataques, sino que un estudio ha mostrado que también ayuda a prevenir las convulsiones. Esto se traduce en que incluso si un paciente sufre un ataque epiléptico, gracias a la ayuda de este cannabinoide quizás no experimente convulsiones.

Ninguno de estos estudios son concluyentes. La mayoría, si no todos, hacen hincapié en la necesidad de que realizar más estudios y en mayor profundidad. Pero el hecho de que esta hipótesis esté siendo debatida, es extremadamente positivo para el mundo del cannabis.

CBDV PARA LOS MUNCHIES

No es ningún secreto que los «munchies» están entre los efectos más conocidos de la marihuana, si no el que más. Todos hemos arrasado con una bolsa de patatas fritas para darnos cuenta de que todavía sentimos que nuestro estómago está vacío, y que debemos dirigirnos al McDonald’s más cercano lo antes posible. Por lo tanto, la conexión entre el cannabis y nuestro sistema digestivo no sorprende a nadie. ¿Y si te dijéramos que el CBDV aislado funciona como «anti-munchies»?

Un estudio de 2012 ha probado que el CBDV es un supresor del apetito, pero sin los efectos secundarios habituales de la mayoría de medicamentos prescritos para casos similares. Quizás en el futuro seamos capaces de curar la obesidad, o al menos de combatirla, gracias a un extracto de CBDV.

La Universidad de Guelph, en Canadá, ha analizado la forma en la que el THCV y el CBDV reducen las náuseas. Los resultados han sido extremadamente positivos, pero el estudio ha llegado a la conclusión de que es necesario seguir investigando para poder llegar a determinar la mejor manera de usar el CBDV en este tratamiento. El cannabis es conocido por ayudar a los pacientes de cáncer a aliviar las consecuencias de su medicación. Esperemos que en el futuro encontremos formas mucho más efectivas y eficientes de emplear este cannabinoide.

Es importante que recalquemos el hecho de que el CBDV NO es un tratamiento ni un medicamento. Tiene potencial, pero todavía no sabemos cuánto ni cómo se puede utilizar de forma efectiva.

¿DÓNDE PUEDES ENCONTRAR CEPAS CON UN ALTO CONTENIDO DE CBDV?

El CBDV es más común entre las cepas índicas autóctonas, ya que son las cepas más puras genéticamente hablando, aquellas en cuyos genes no ha influido la experimentación humana. Han evolucionado de la mano de la naturaleza, y este es siempre el mejor camino. Otra gran forma de obtener CBDV es extrayéndolo del cáñamo. Por definición legal, este primo de la marihuana contiene menos de un 0,3% de THC. Una buena cepa de cáñamo tiene un ratio de CBD respecto a THC de 100:1. Y esto supone una valiosa ayuda para quienes necesitan tratar a sus hijos.

Como hemos mencionado con anterioridad, el CBDV está más presente en variedades con una pequeña cantidad de THC pero ricas en CBD. Esto incluye sativas como la Dance World, la Royal Medic y la Painkiller XL, además de índicas como la Euphoria o la Medical Mass.

Así que ahora que ya conoces más acerca de este cannabinoide, asegúrate de difundir la información. La comunidad del cannabis tiene diversos problemas, y uno de los principales es la difusión de información errónea. Trata de educar a tus amigos y a tus seres más cercanos. Quizás incluso alguien de tu familia se podría beneficiar de este compuesto específico. No tengas miedo de sugerir el cannabis como forma de tratamiento. Puede que de primeras te desaprueben, pero en el futuro sus beneficios hablarán por sí solos.

Esto ya es lo suficientemente difícil de explicar, pero para complicar las cosas aún más, los cannabinoides tienen distintos efectos cuando trabajan juntos, dependiendo de la densidad que la cepa tenga de cada uno de ellos. El THC, por ejemplo, ha mostrado efectos más potentes cuando la presencia del CBD disminuye, y viceversa. Esto se denomina «efecto séquito» (sí, como la serie de televisión y película homónimas).

Hasta la última década no se han descubierto muchos fitocannabinoides, y uno de ellos es el CBDV. Se trata de un cannabinoide no psicoactivo, como su primo el CBD, y se ha probado su utilidad en una amplia gama de afecciones médicas y terapéuticas. Y no solo como tratamiento, sino también como complemento para medicaciones ya existentes.

Fuente Royal Queen Seeds