Johnson se une a las crecientes filas de ex jugadores de la NFL que se sinceran sobre sus rutinas de marihuana después de los partidos y entrenamientos.
Cuando Calvin Johnson anunció su retiro de la NFL en marzo de 2016, los defensas de toda la liga dieron un suspiro colectivo de alivio. Apodado «Megatron» por su velocidad sobrehumana, su fuerza y su habilidad para arrancar el balón de la nada, Johnson se había pasado toda su carrera quemando a los cornerbacks y marcando touchdowns.
Sin embargo, fuera del campo, Johnson tuvo que luchar con lesiones constantes y dolor crónico. Pero en lugar de recurrir a los opiáceos como recomendaron los médicos del equipo, Johnson dice que se fumaba un porro después de cada enfrentamiento de los domingos.
En un reciente perfil post-jubilación del escritor de Sports Illustrated Michael Rosenberg, Johnson dijo que durante sus días de juego, el personal de entrenamiento de los Detroit Lions repartía analgésicos recetados como caramelos. Pero después de darse cuenta de la cantidad de opioides que tenía en su cuerpo y en su psique, Johnson recurrió al cannabis y nunca miró hacia atrás.
«Cuando llegué a la liga,[hubo] abuso de opiáceos», dijo Johnson a SI. «Podrías ir a la sala de entrenamiento y conseguir lo que querías. Puedo tomar Vicodin, puedo tomar Oxy[contin]. Estaba demasiado disponible. Usé Percocet y cosas así. Y no me gustaba la forma en que me hacía sentir. Tenía mi opción preferida de medicina. Cannabis.»
En los últimos años, a medida que el cannabis se ha ido generalizando y ha comenzado a deshacerse de su estigma de décadas de antigüedad, varias ex estrellas de la NFL de generaciones actuales y pasadas han expresado su apoyo a la legalización del cannabis y, más concretamente, a la abolición de la estricta prohibición de la marihuana por parte de la NFL.
«No se trata del bienestar de los jugadores», dijo Johnson a SI sobre los protocolos de manejo de lesiones y dolor de la NFL. «[Es] sólo sobre tener ese producto.»
Funcionarios de la NFL han dicho que realizarán una investigación conjunta con la Unión de Jugadores de la liga para estudiar la eficacia del cannabis para el control del dolor, la recuperación y la salud mental, pero esos esfuerzos han sido lentos en materializarse. Mientras tanto, los jugadores de la NFL todavía están sujetos a frecuentes pruebas de drogas, y pueden ser castigados con multas y suspensión por mostrar rastros de THC en su sistema.
