El primer laboratorio ilegal de extracción y producción sintética de DMT fue descubierto recientemente en Chile, donde la creciente demanda estarían incentivando su producción de forma industrial.
El 24 de mayo, las autoridades chilenas identificaron un laboratorio dedicado al procesamiento de N-dimetiltriptamina (DMT o N,N-DMT), denominada como la “molécula espiritual”. El laboratorio fue hallado en la ciudad de Antofagasta, ubicada al norte de Chile. Un ingeniero electrónico de 22 años fue detenido y se incautaron 270.945 dosis, avaluadas en más de 2.700 millones de pesos chilenos (US$3.803 millones).
Mediante un comunicado, la Fiscalía de Chile señaló que, a pesar de que en el país se había identificado la presencia de DMT, este es el primer laboratorio dedicado a la producción de esta droga que encuentran las autoridades.
El fiscal regional Alberto Ayala indicó que el laboratorio fue descubierto después de un mes de labores de inteligencia desarrolladas entre los carabineros y el ministerio público, y que a pesar de las características “artesanales” del lugar, su hallazgo “es algo que podría traer graves consecuencias no solo para nuestra región sino para el país”, debido a que las autoridades no descartan que el consumo de esta sustancia se esté produciendo en otras zonas de Chile.
De acuerdo con las autoridades chilenas, la N-DMT es elaborada a partir de una sustancia extraída de la Mimosa hostilis o tenuiflora, una planta cultivada en Brasil, Venezuela, Colombia, Panamá, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Guatemala, Belice y México. Se sabe que dicha planta es uno de los principales componentes de la bebida de ayahuasca, de uso común en ceremonias de comunidades indígenas amazónicas, y es además un atractivo turístico.
Según el capitán Erich Ehrenfeld Zapata, jefe de la sección OS-7 de carabineros, la materia prima era ingresada a Chile legalmente a través de compras realizadas en Brasil por internet. En Chile se venden dosis de 50 mg a 10 mil pesos chilenos (US$14 aproximadamente), razón por la que las autoridadesestiman que su venta les habría producido a los criminales ganancias de alrededor de 17 millones de pesos chilenos (casi US$24.000).
Análisis de InSight Crime
Algunas comunidades indígenas de Latinoamérica, como los mayas y diversas tribus nativas de Brasil, reconocen las propiedades de esta planta, como ser antimicrobiana, analgésica y regeneradora celular. Los efectos psicoactivos de esta sustancia, que puede ser consumida en estado sólido o líquido, atacan directamente al sistema nervioso central; es una droga antidepresiva y produce alucinaciones profundas.
Su presencia en Chile habla de un considerable aumento de las drogas sintéticas en uno de los países más ricos de Suramérica en este momento. Según cifras de la policía, entre 2017 y 2019 el consumo de drogas sintéticas, especialmente el éxtasis, ha aumentado un 680 por ciento.
El director de la Jefatura Nacional Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Jenanco), Alejandro Eberl, dice que las drogas sintéticas eran “inicialmente para las élites, pero hoy en día se utilizan de manera masiva y llegan a manos de personas de diferentes estratos socio-económicos”.
Un informe sobre drogas sintéticas en 2017 de Naciones Unidas señala que el consumo de drogas sintéticas, como el éxtasis, la ketamina, la metanfetamina, el LSD y el GHB, han estado aumentando en Suramérica desde 2013.
Pero el DMT parece ser un vacío en este mercado de drogas sintéticas. Si bien hay una alta demanda, hasta el momento no se ha conocido prácticamente ningún informe sobre grupos criminales que estén aprovechando esta oportunidad de manera significativa.