Son muchas las ciudades de Europa que sieguen sin tener acceso al cannabis medicinal, lo cual se traduce en el incremento del mercado negro.
Según KFGO, los europeos gastaron al menos 11,600 millones de euros, o 12.700 millones de dólares, en cannabis procedente de fuentes ilegales. Esto mantiene al cannabis en la cima como la mayor fuente de dinero del mercado negro de la Unión Europea.
El Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT) afirma en su informe anual que el valor del mercado es de al menos 30 000 millones de euros, frente a los 24 000 millones de euros de 2013. La venta ilegal de productos de cannabis representaba el 39 por ciento del mercado de drogas de la UE, frente al 38 por ciento en 2013. El informe también mostró que gran parte del dinero proviene de la actividad de las pandillas.
Los datos también muestran que gran parte del cannabis en la Unión Europea proviene de los EE.UU. Sin embargo, gran parte de la resina importada proviene principalmente de Marruecos, y gran parte de la flor se importa de Albania. «El mercado europeo de drogas se caracteriza cada vez más por el acceso de los consumidores a una amplia variedad de productos de alta pureza y alta potencia», señala el informe.
El informe también afirma que parte de las ganancias de este dinero ilegal van a parar a organizaciones militantes. Los narcóticos son una fuente importante de ingresos para grupos como Boko Haram de África Occidental, el Estado Islámico y al-Shabaab de Somalia. También afirmó que se estaban utilizando criptomonedas y otros métodos de lavado para llevar a cabo actividades delictivas.
Con todos estos números apuntando a una conexión importante entre el cannabis ilegal y el crimen, sólo tiene sentido legalizar. Afortunadamente, la Unión Europea por fin está empezando a aceptar cosas como el CDB como tratamiento para las convulsiones y Luxemburgo finalmente legalizando el cannabis. Esperemos que sea sólo cuestión de tiempo que otros países de Europa cambien de opinión.
