La osteoartritis es una condición inflamatoria que puede causar dolor, pérdida de movilidad y rigidez. Esta condición, que también afecta a los humanos, es bastante frecuente en los perros. Alrededor del 20 por ciento de los perros mayores de un año sufren de esta condición, y el riesgo aumenta a medida que los perros crecen. Esta enfermedad puede hacer que los perros se irriten, se vuelvan letárgicos o se muestren reacios a correr o jugar.
Los investigadores del Baylor College of Medicine de Texas reclutaron 20 perros de razas grandes a los que previamente se les había diagnosticado osteoartritis canina para este estudio clínico doble ciego. Durante cuatro semanas, cada perro fue asignado al azar a uno de los cuatro grupos. Uno de estos grupos recibió un placebo, mientras que los otros tres grupos recibieron cada uno una preparación diferente de CBD.
A un grupo de perros se le dio una dosis de 50 mg de aceite puro de CBD todos los días durante el curso de la prueba, a otro grupo se le dio 20 mg de CBD puro, y un tercer grupo recibió 20 mg de CBD liposomal. Las medicinas liposomales utilizan la nanotecnología para encapsular los compuestos medicinales en diminutas burbujas de lípidos, que pueden ser absorbidas más fácilmente por el cuerpo que los medicamentos tradicionales.
Los veterinarios evaluaron la movilidad y el dolor de los perros antes, durante y después del estudio, y también se pidió a los dueños de los perros que informaran sobre la calidad de vida de sus mascotas. Los investigadores encontraron que los perros en el grupo de placebo y en el grupo de baja dosis/ 20mg de CBD no mostraron signos de mejora durante el estudio. Sin embargo, tanto el grupo de CBD alto como el grupo de CBD liposomal vieron una mejora significativa en su calidad de vida.
«Admito abiertamente que me sorprendió la rapidez con la que vimos resultados tan grandes», dijo a Forbes el investigador principal Matthew Halpert PhD, miembro de la facultad del Departamento de Patología e Inmunología del Baylor College of Medicine. «No habría esperado ver demasiado de nada en sólo un mes».
Halpert dijo que los perros de los grupos de placebo y de bajo CDB seguían con sus padecimientos como antes del estudio. Pero en cuanto a la reducción del dolor y el aumento de la movilidad, «casi todos los perros [en los otros dos grupos de CBD] vieron una mejora significativa en sus condiciones… Y los perros parecían más felices y eran capaces de hacer más».
Los investigadores también encontraron que los beneficios de la CBD incluso persistieron después de que el ensayo terminara. Dos semanas después de dejar de tomar el medicamento, los perros de los dos grupos con mayor CBD aún mostraban signos de mejora. «Esto nos diría que la CBD estaba de hecho abordando los problemas inflamatorios subyacentes», explicó Halpert. «No sólo estaba enmascarando el dolor».
Halpert estaba particularmente sorprendido por el éxito del tratamiento liposomal. La dosis de 20mg de CBD liposomal fue efectiva, mientras que 20mg de CBD puro no lo fue. Sin embargo, otros investigadores siguen siendo escépticos con estos hallazgos. El especialista en anestesia veterinaria y control del dolor Stephen Cital dijo a Forbes que debido a que los investigadores no midieron los niveles de CBD en la sangre de los perros, no pudieron concluir que el método de administración liposomal realmente hiciera una diferencia.
Entre 2018 y 2019, el mercado de CBD para mascotas de EE.UU. creció diez veces, alcanzando 321 millones de dólares en ventas a finales del año pasado, según el Grupo Brightfield. Este año, se espera que el mercado crezca hasta los 563 millones de dólares. Un estudio encontró que la CBD podría ayudar a combatir el cáncer cerebral en perros (y también en humanos), pero en general, los beneficios de la CBD para las mascotas son en gran parte anecdóticos.
Sin embargo, muchos veterinarios informan que la CBD es en gran medida efectiva y segura para los perros. El propio Cital usó la CBD para ayudar a tratar a su propio perro que sufría de problemas de movilidad. El veterinario de California, Gary Richter, dijo a Forbes que también ha visto a varios perros responder bien a la CBD, pero que ha notado algunos efectos secundarios menores, como valores hepáticos elevados y vómitos ocasionales.
Dado que no existe un consenso científico que apoye el uso de la CBD para mascotas, Richter, Cital y otros veterinarios instan a los dueños de mascotas a hablar con su propio veterinario antes de decidirse a usar productos de CBD en sus mascotas. «Hay muchos productos en el mercado y no todo está hecho correctamente, no todo está etiquetado con precisión, no todo tiene en la botella lo que dice la etiqueta», advirtió Richter.
Vía Merry Jane