La marihuana está demostrando combatir el cáncer. Algunos estudios señalan que los cannabinoides de la planta pueden ser capaces de destruir tumores cancerígenos y tratar la enfermedad. Otros indican que el cannabis tiene mucho que decir en el tratamiento del cáncer, al mitigar los devastadores efectos secundarios de la quimioterapia.
La relación entre cannabis y cáncer parece ser cada vez más fuerte a medida que la investigación acerca de la hierba aumenta. Quizás uno de los descubrimientos más interesantes en este ámbito incluye la identificación del sistema endocannabinoide y cómo los compuestos del cannabis tienen un efecto único y determinado sobre funciones concretas del cuerpo humano. Otro es el hallazgo del potente efecto anticancerígeno de cannabinoides como el THC y el CBD. Además de estas interesantes aplicaciones, el cannabis también se empieza a reconocer como medicina herbal que puede aliviar los devastadores efectos secundarios de un tipo de tratamiento habitual para el cáncer: la quimioterapia.
¿QUÉ ES LA QUIMIOTERAPIA?
La quimioterapia es una vía de tratamiento del cáncer mediante el consumo de ciertos medicamentos que busca la eliminación de células del cuerpo humano. Existe una gran variedad de medicamentos para quimioterapia, algunos de los cuales se usan de manera combinada. En ocasiones también se complementan con otras estrategias de tratamiento con otros efectos secundarios, como la radiación. Los medicamentos quimioterapéuticos actúan para matar células corporales que están a punto de dividirse en dos nuevas células.
La idea es que debido a que las células cancerígenas se multiplican más rápido que las células sanas, tienen más probabilidades de resultar destruidas. Algunos de estos medicamentos actúan dañando núcleo de las células, mientras otras afectan a determinados procesos químicos que ocurren dentro de las células.
Es habitual que la quimioterapia provoque problemas porque estos fármacos también perjudican a las células normales y sanas. Las células sanas que más suelen sufrir están en la boca, la sangre, el aparato digestivo y el pelo. Como ejemplo, la quimioterapia suele fracasar muchas veces como tratamiento para el cáncer en Estados Unidos. Quizás por este motivo mucha gente intenta buscar alternativas y soluciones naturales para el tratamiento del cáncer. Entre ellos, algunos recurren a aceites y extractos de cannabis de gran pureza y potencia, con elevadas concentraciones de THC y CBD.
El Dr. Leonard Coldwell afirma que, «si tienes un jardín con flores y arbustos, árboles y césped, y algunas malas hierbas, y llegas con un insecticida y lo quemas todo, una vez esté todo muerto, esperas que sólo vuelva lo bueno». Añade: «bombardean todo el organismo y luego dicen que el cáncer está remitiendo».
Un tratamiento tan duro puede causar efectos secundarios como dolores, fatiga, trastornos en la sangre, irritaciones de boca y garganta, náuseas, vómitos y diarrea, por nombrar sólo algunos. Sin embargo, aquí es donde la marihuana entra en escena de nuevo. Ciertas propiedades de la planta, son perfectas para contrarrestar algunos de los horribles efectos secundarios producidos por la administración de la quimioterapia.
¿CÓMO PUEDE AYUDAR EL CANNABIS?
El cannabis parece ser tan eficaz para mitigar los efectos de la quimioterapia que ya existen productos farmacéuticos relacionados con el cannabis disponibles a tal efecto. Cannabinoides sintéticos como el dronabinol y la nabinola se usan para reducir las náuseas y vómitos que provoca la quimioterapia. Estas drogas sintéticas simulan el cannabinoide psicoactivo de la marihuana llamado THC.
Un informe titulado «Cannabinoides para el control de las náuseas y vómitos inducidos por la quimioterapia: análisis cuantitativo sistemático», publicado en el British Medical Journal intentaba explorar los efectos antieméticos de los cannabinoides. Los autores señalan que los cannabinoides habían resultado más efectivos para reducir las náuseas y los vómitos que muchos otros medicamentos antieméticos.
Los investigadores concluían que «…los cannabinoides analizados aquí fueron ligeramente superiores a los antieméticos convencionales tras la quimioterapia y, además, los pacientes los preferían». Asimismo, mencionaban que los efectos secundarios de los cannabinoides podrían limitar su uso generalizado, aunque también señalaban que «en pacientes concretos, los cannabinoides podrían ser también útiles al mejorar el estado anímico y controlar los malestares asociados a la quimioterapia».
OTRAS PRUEBAS
A mayores, el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos explica, «El cannabis y los cannabinoides se han estudiado en laboratorio y a nivel clínico para aliviar dolores, náuseas, vómitos, ansiedad y pérdida de apetito».
Se cree que los receptores cannabinoides que están localizados en el cerebro juegan un papel importante en el control de las náuseas y los vómitos. El THC podría actuar sobre estos receptores y evitar los vómitos que provocan ciertos tipos de quimioterapia.
LEGISLACIÓN OBSOLETA
Por desgracia, en la misma página informativa de ese portal oficial también se menciona hipócritamente que la marihuana es ilegal a nivel federal en los Estados Unidos, aunque algunos estados han decidido implantar ciertos cambios.
APETITO
El cannabis podría ofrecer a los pacientes que estén sometiéndose a tratamientos de quimioterapia ciertas ventajas al estimular su apetito. Estudios con animales han comprobado que el THC y otros cannabinoides pueden reducir la sensación de repulsa a los alimentos, animando al paciente a comer a pesar de su falta de ganas y de estar sufriendo náuseas.
DOLOR
El cannabis también ayuda con el alivio del dolor. Los receptores cannabinoides se ubican en el cerebro, la médula espinal y las terminaciones nerviosas. También tienen efectos antiinflamatorios que pueden contribuir al alivio del dolor. El Instituto Norteamericano de Salud también afirma que «estudios en animales han mostrado que los cannabinoides pueden prevenir problemas nerviosos (dolor, entumecimiento, cosquilleos y debilidad muscular) causados por algunos tipos de quimioterapias».
LA MARIHUANA POSEE UN GRAN POTENCIAL
Aunque siga siendo ilegal, el avance en la comprensión científica del cannabis y los cannabinoides y su función en el tratamiento del cáncer y como asistencia a la quimioterapia son innegables. El cannabis es, obviamente, una gran alternativa natural como medicina herbal para quienes están enfrentándose a la terrible experiencia de un tratamiento de quimioterapia. Sin embargo, algunos defienden (y la ciencia ofrece diversas pruebas que los respaldan) que la quimioterapia no tiene sentido en absoluto y que la marihuana tiene el potencial para tratar esta enfermedad por sí sola.