En reacción a la creciente epidemia de enfermedades y muertes por vaporizadores, el concejal de la ciudad de Los Ángeles, Paul Krekorian, presentó una moción que impondría la prohibición de la venta de todos los tipos de productos de consumo vaporizado de cannabis en la ciudad.
La moción pide que el Departamento de Regulación del Cannabis (DCR) emita un informe sobre los resultados de las pruebas de laboratorio sobre la seguridad de los productos de cannabis. También le daría a la DCR la autoridad para presentar recomendaciones sobre cómo el consejo municipal podría eliminar todas las amenazas conocidas a la salud pública.
«Estoy tratando de detener la inhalación de cannabis hasta que se demuestre que es seguro», dijo Krekorian en un comunicado de prensa, sin dejar espacio para interpretaciones alternativas. De acuerdo con la moción, los laboratorios de pruebas en California tienden a centrarse en la pureza en lugar de probar los aditivos y espesantes. «En virtud de la legislación estatal y local, los laboratorios de análisis están autorizados para analizar tanto el cannabis como los productos de cannabis y, según el Departamento de Regulación del Cannabis, existen 15 instalaciones de este tipo que cuentan con aprobaciones temporales. Sin embargo, esas instalaciones de prueba parecen centrarse en la pureza de las plantas individuales de cannabis, no en la seguridad de los aditivos o de los dispositivos de entrega», dice la moción.
La ordenanza se renovaría automáticamente cada año hasta que el Consejo de la Ciudad de Los Ángeles determine que los productos de vaporización de cannabis son «seguros para el uso del consumidor». Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, se han atribuido 12 muertes a los vaporizadores, y se han reportado 805 incidentes.
Por estas razones, el gobierno de la ciudad está tomando medidas inmediatas, encabezado por Krekorian y otros concejales de la ciudad. «En respuesta a la amenaza a la salud pública que representan los productos de vaporización y la rápida aparición de enfermedades pulmonares letales causadas por la vaporización; el Consejo solicitó que el Procurador de la Ciudad redactara una ordenanza que prohíba la venta de todos los productos de cannabis y accesorios asociados utilizados para la vaporización dentro de la Ciudad de Los Ángeles por un año, y que exija la renovación de esa prohibición cada año, a menos que y hasta que el Consejo determine que determinados productos de vaporización de cannabis han sido considerados seguros para el uso de los consumidores», agregó la moción.
