El nuevo informe de CDC revisó la tasa de fallecimientos por sobredosis de drogas en zonas urbanas y rurales del país y los investigadores encontraron que ambas aumentan, pero desde el año 2015 ocurre más en las áreas urbanas.
AP – La epidemia de drogas se está volviendo cada vez más urbana. Ahora las tasas de mortalidad por sobredosis en las ciudades superan a las de zonas rurales por primera vez en años, según revela un estudio publicado este viernes por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El estudio muestra que los índices de mortalidad por drogas en las ciudades están superando a los de las zonas rurales, con una tasa de sobredosis en hombres más alta en las urbes, mientras que una mayor cantidad de mujeres muere por sobredosis en los pueblos, donde continúan siendo más altas las tasas de mortalidad relacionadas con metanfetaminas y analgésicos opiáceos recetados.
Los números
Los datos del estudio se remontan a 1999. Durante ese tiempo las tasas de mortalidad fueron en ocasiones más altas en las ciudades y en otras más altas en las zonas rurales.
Un gráfico que acompaña a la investigación muestra que:
Entre 1999 y el año 2004 las tasas de mortalidad en las áreas urbanas fueron más altas en las ciudades.
Entre 2004 y 2007 las tasas fueron más o menos las mismas en ambas zonas
Entre 2007 y 2015 las sobredosis en zonas rurales empezaron a superar a las urbanas.
El estudio encontró que las tasas de mortalidad en las zonas urbanas aumentaron de una manera más rápida que en las zonas rurales hasta el año de 2017, donde terminan los datos.
NuevaYork, Chicago y Baltimore reportaron fuertes aumentos en el número de muertes por sobredosis durante los últimos años pero no son las únicas.
Durante 2017, las sobredosis de drogas fueron relacionadas con 70,237 muertes, provocadas en gran medida por opioides sintéticos como el fentanilo, una droga 50 veces más potente que la heroína , que según el estudio sería la responsable del aumento de las tasas de mortalidad en las ciudades.
Conclusión del estudio:
Los datos preliminares del año 2018, que no fueron incluidos en el estudio presentado este viernes, sugieren que por primera vez en casi tres décadas la crisis de los opiáceos podría haber causado menos muertes.
Cerca de 68,000 estadounidenses murieron de sobredosis el año pasado comparado con más de 70,000 en 2017, según las estadísticas preliminares del gobierno, reportadas hace un mes.
Los funcionarios de la oficina de salud pública tardarán varios años más en determinar si los resultados se convertirán en una tendencia descendente de manera más prolongada.
Los datos presentados este viernes señalan que las tasas de mortalidad urbana y rural fueron casi idénticas para el grupo de personas localizadas en el grupo de 25 a 44 años, sin embargo para el grupo de 45 a 65 años de edad la tasa urbana fue más alta.
Además de por el uso de drogas, entre las personas blancas de origen rural destacan otros factores como el suicidio o las enfermedades relacionadas con el consumo excesivo de alcohol en lo que los académicos llaman «muertes por desesperación», impulsadas por la ansiedad económica.
La actual epidemia de los opioides es considerada como la más mortal en la historia estadounidense.